Barranco del Gorgonchón

Barranco Gorgonchón
(Río Formiga)
01/08/09
NegritaCategoría: Nivel III
Roca: Caliza
Longitud: 120 m
Desnivel: 20 m
Aproximación: 15 min
Recorrido: 1 h
Retorno: 15 min
Material: Neopreno, casco, arnés y cuerda (no llevar mochila)
Nota: Es muy importante rapelar la segunda cascada al final del pasamanos. Si no se hace así, la fuerza de la cascada te absorve y te lleva a un agujero oculto del que es imposible salir.

Después de descender por enésima vez el Formiga, por la tarde nos proponemos hacer el Gorgonchón, un barranco que se podría definir como un buen café italiano: corto e intenso, muy intenso. La infinita estrechez de sus pasillos hará que alguna vez nos quedemos encajonados entre sus excepcionales paredes.



Antes de llegar al pueblo de Bastarás y en dirección Yaso, tomamos una pista a mano derecha y bajamos hasta el parking entre campos de cultivo.

Seguimos por la pista en dirección Sur-Sureste y al fondo del valle vemos el corte que ha provocado el Gorgonchón en el conglomerado. Dejamos la pista por un sendero que nos llevará al principio del barranco que pertenece a la cuenca del Barranco del Formiga.

Como mucho se permite un grupo de cuatro personas para descender el Gorgonchón

Al principio el río fluye con enorme tranquilidad y quietud, pero de repente, las aguas desaparecen por una hendidura que es por donde empezamos a colarnos nosotros. A medida que avanzamos, superamos un pequeño destrepe y el barranco se estrecha más y más y la luz va desapareciendo. Se recomienda no llevar mochila.

Al poco llegamos a la primera cascada de unos seis metros. El cielo se ha oscurecido y empieza a llover sobre nuestras cabezas. Opositamos sin mayor dificultad para realizar un fácil salto.

Continuamos encajonados para llegar a la 'trampa del Gorgonchón': la segunda cascada, en la que si rapelamos sin usar el pasamanos, estamos condenados, pues la fuerza del agua nos empujaría hacia el interior de un agujero oculto por la caída del agua de donde es imposible salir debido a la fuerza del agua y porque su salida inferior es sumamente estrecha y no cabe el cuerpo de una persona. Esta trampa se ha cobrado 4 vidas y ha dado quebraderos de cabeza a más de uno.


Oposición para salvar la segunda cascada. Ayudados de un pasamanos, hemos de llegar al final de este. Si rapelamos en la cascada estamos perdidos, pues la cascada nos absorverá a una poza sin salida.

La forma de superar esta segunda cascada, será en oposición, utilizando el pasamanos de unos cinco metros de longitud, para llegados al final del mismo, montar un rapel que nos depositará en el cauce.

A partir de aquí, continuaremos con las estrecheces, un sifón y un caos que nos llevarán a una zona de espectaculares formas. Da la impresión de que nos encontramos en una caverna con las paredes repletas de musgo.

Superamos un nuevo sifón que nos alejará de las zonas umbrías del barranco. El barranco finaliza en una represa. Desde aquí, seguimos por un canal de riego hasta que a nuestra izquierda asciende un sendero que incluye un tramo con escaleras. Remontamos el barranco por su vertiente izquierda hasta la pista. Rehacemos el trayecto hasta los coches.

En algunos momentos parecía que la lluvia arreciaba y hemos tenido que acelerar nuestro paso. Al ser un barranco sumamente estrecho, las lluvias torrenciales podrían hacer crecer su caudal de forma inesperada.


MAS FOTOS DEL DESCENSO

Inicio del descenso, el barranco se nos presenta encajonado


Avanzamos mediante oposición. De esta forma superamos la primera cascada, con un salto al final del tramo


La lluvia arrecia y complica el avance por las mojadas paredes del cañón y su segunda cascada. Se necesita gran fuerza en los brazos para avanzar con seguridad


Finalmente descendemos rapelando hasta el fondo del estrecho río y así superamos su oculta trampa


Superados los tramos de mayor dificultad podemos disfrutar de la gran belleza del cañón


Panorámica de todo el encajonado barranco desde su tramo final