19 de agosto 2006
Vía: Pradera de Ordesa, refugio de Góriz (vía clásica)
Tiempo: 9:30 h (2 jornadas)
Desnivel: 2.055 m
Altitud: 3.355 m
Dificultad: Media (atención a la escupidera)
Material: Crampones y piolet

El Monte Perdido forma junto con el Cilindro (del Marboré) y el Soum de Ramond (o Pico Añisclo), las Tres Sorores (las tres hermanas), según cuenta una de las muchas leyendas, fueron tres hermanas que huyendo de los ataques godos se intentaron refugiar en las montañas para no caer en sus manos y fueron sepultadas por las nieves formando estas tres emblemáticas cumbres.

Sobre las 11 de la mañana llegamos a Torla (1.032 m), donde dejamos los coches en el aparcamiento, para subir hasta la Pradera de Ordesa con el autobús del parque (es el único medio permitido durante los meses de verano que son los más concurridos).
Una vez en la Pradera, seguimos el camino paralelo al Río Araza hasta la Cola de Caballo (2h 30'). Desde aquí subimos por las Clavijas de Soaso hasta el Refugio de Góriz en 2 horas más (2.190 m). Aquí pasaremos la noche. Cena: 12 eur, pernocta: 12 eur y desayuno: 3,5 eur.
Nos levantamos a las 06:30 y después del frugal desayuno emprendemos la marcha. El día amanece muy nublado y ha llovido, e incluso granizado, toda la noche. Una noche de perros para los campistas ubicados alrededor del refugio. La lluvia caída a esta altura se ha convertido en nieve a cotas más altas, lo que dificultará sin duda la ascensión.
Desde Góriz cogemos una senda ascendente dirección NE. A medida que ascendemos la nieve en el suelo se vuelve cada vez más frecuente, hasta el punto de convertir un paso normalmente fácil en algo que resulta sumamente resbaladizo y peligroso. Es aquí donde de los 5 componentes de la excursión 3 de ellos deciden dar marcha atrás. Tras el difícil paso, llegamos al Lago Helado (2.980 m), donde giramos en dirección SE. Nos colocamos los crampones, pues la nieve y el hielo son dueños absolutos de la montaña en pleno agosto y hay que evitar todo riesgo innecesario.
Tras conversar con dos montañeros, ellos deciden dar media vuelta y nosotros miramos la forma más fácil de atacar finalmente la ascensión. Decidimos hacerlo por la cresta derecha, para luego entrar en la canal y ya en fuerte subida hacer la cumbre (3.355 m). La abundante nieve nos facilita la parte final de la ascensión. Hemos superado la famosa escupidera, que ostenta un gran número de muertes por resbalones inesperados. Lamentablemente las vistas no son muy buenas, debido a la abundante niebla.
La bajada a diferencia de la subida la haremos toda por la canal. Hemos tardado aproximadamente unas 8 horas en llegar a la cima y volver al refugio. La abundante nieve y hielo ha hecho que el camino sea de lo más complicado y lento. Hemos coronado la tercera montaña más alta del Pirineo.
Desde Góriz cogemos una senda ascendente dirección NE. A medida que ascendemos la nieve en el suelo se vuelve cada vez más frecuente, hasta el punto de convertir un paso normalmente fácil en algo que resulta sumamente resbaladizo y peligroso. Es aquí donde de los 5 componentes de la excursión 3 de ellos deciden dar marcha atrás. Tras el difícil paso, llegamos al Lago Helado (2.980 m), donde giramos en dirección SE. Nos colocamos los crampones, pues la nieve y el hielo son dueños absolutos de la montaña en pleno agosto y hay que evitar todo riesgo innecesario.
Tras conversar con dos montañeros, ellos deciden dar media vuelta y nosotros miramos la forma más fácil de atacar finalmente la ascensión. Decidimos hacerlo por la cresta derecha, para luego entrar en la canal y ya en fuerte subida hacer la cumbre (3.355 m). La abundante nieve nos facilita la parte final de la ascensión. Hemos superado la famosa escupidera, que ostenta un gran número de muertes por resbalones inesperados. Lamentablemente las vistas no son muy buenas, debido a la abundante niebla.
La bajada a diferencia de la subida la haremos toda por la canal. Hemos tardado aproximadamente unas 8 horas en llegar a la cima y volver al refugio. La abundante nieve y hielo ha hecho que el camino sea de lo más complicado y lento. Hemos coronado la tercera montaña más alta del Pirineo.

Después de la ascensión del día anterior, decidimos tomarnos el día con más calma. Nos despedimos de nuestros compañeros de excursión, que inician el regreso hacia la Pradera. Nosotros hoy nos acercaremos desde el refugio dirección E, por la senda del Collado Superior de Góriz, siguiendo el GR-11 hasta la Punta de las Olas (3.002 m), que no conseguimos subir pues la senda no está muy bien marcada y no logramos dar con ella. Continuamos por el valle hasta tener una espectacular vista del cortado que ha provocado el Cañón de Añisclo.
Un día de lo más relajado.
La vuelta la realizaremos por la Pradera de Ordesa.