6/08/06
Dificultad: media
Aproximación: 1 h
Recorrido: 2 h
Retorno: 3 h
Material: equipo básico de vías ferratas
La primera vía ferrata que realicé en compañía de unos buenos amigos alemanes. Después de una semana de senderismo por la zona del SüdTirol austriaco, el mal tiempo nos obliga a ir a la zona norte de Italia donde poder seguir practicando diversos deportes de montaña.
Descubriendo las vías ferratas por primera vez.
Desde el pueblo de Arco, donde nos hospedamos, vamos en direción al Monte Baldo-Cime del Baldo. La aproximación la realizamos por un cómodo camino entre bosques que se encuentra perfectamente señalizado, por el sendero 652-685
Una escalera de unos 10 metros nos marcará el inicio de la vía, escalera que se encuentra situada en una impresionante cuenca calacárea que impresiona por sus dimensiones y recuerda el ábside de una enorme iglesia. Pasada la escalera continuaremos por enormes y expuestas paredes (Vía del Carbonai), con unas espectaculares vistas panorámicas y donde hay que tener cuidado en donde se pone el pie para no desprender ninguna piedra pues tenemos justo debajo nuestro parte de la vía.
Tramo inicial de la ferrata con la escalera que salva un desplome.
Después de este tramo la vía continua bastante vertical y por medio de un bonito bosque, donde aprovecharemos los árboles como ayuda en nuestra progresión. Tras el paso por el bosque volvemos a encontrarnos de nuevo en la zona del Carbonai, pero esta vez a más altura. Aquí empieza una de las partes más espectaculares, pues la magnitud de la pared hace que se nos vea como un simple puntito en la pared.
Finalmente un nuevo tramo vertical nos llevará al final de la vía, donde comeremos aplaciblemente (1.100 m), para iniciar el retorno por un nuevo sendero que en unas 3 horas nos devolverá a nuestro punto de partida.
Accediendo a la Vía del Carbonai
Avanzamos por grandes paredes verticales.
Espectacular pared calcárea de enormes magnitudes.
Tramo final de la vía, un sendero nos conducirá a nuestro punto de inicio.
Dificultad: media
Aproximación: 1 h
Recorrido: 2 h
Retorno: 3 h
Material: equipo básico de vías ferratas
La primera vía ferrata que realicé en compañía de unos buenos amigos alemanes. Después de una semana de senderismo por la zona del SüdTirol austriaco, el mal tiempo nos obliga a ir a la zona norte de Italia donde poder seguir practicando diversos deportes de montaña.
Descubriendo las vías ferratas por primera vez.Desde el pueblo de Arco, donde nos hospedamos, vamos en direción al Monte Baldo-Cime del Baldo. La aproximación la realizamos por un cómodo camino entre bosques que se encuentra perfectamente señalizado, por el sendero 652-685
Una escalera de unos 10 metros nos marcará el inicio de la vía, escalera que se encuentra situada en una impresionante cuenca calacárea que impresiona por sus dimensiones y recuerda el ábside de una enorme iglesia. Pasada la escalera continuaremos por enormes y expuestas paredes (Vía del Carbonai), con unas espectaculares vistas panorámicas y donde hay que tener cuidado en donde se pone el pie para no desprender ninguna piedra pues tenemos justo debajo nuestro parte de la vía.
Tramo inicial de la ferrata con la escalera que salva un desplome.Después de este tramo la vía continua bastante vertical y por medio de un bonito bosque, donde aprovecharemos los árboles como ayuda en nuestra progresión. Tras el paso por el bosque volvemos a encontrarnos de nuevo en la zona del Carbonai, pero esta vez a más altura. Aquí empieza una de las partes más espectaculares, pues la magnitud de la pared hace que se nos vea como un simple puntito en la pared.
Finalmente un nuevo tramo vertical nos llevará al final de la vía, donde comeremos aplaciblemente (1.100 m), para iniciar el retorno por un nuevo sendero que en unas 3 horas nos devolverá a nuestro punto de partida.
Accediendo a la Vía del Carbonai
Avanzamos por grandes paredes verticales.
Espectacular pared calcárea de enormes magnitudes.
Tramo final de la vía, un sendero nos conducirá a nuestro punto de inicio.
